La conciencia no se genera en ningún lado, no nace ni desaparece. No tiene origen ni tiene fin.
Nota de Mente Lojong: Algunas interpretaciones cuentan ahora con enlaces a libros que recomandamos de cada autor por los que podríamos obtener una pequeña comisión.
Echa un vistazo a lo más básico de tu mente, esa conciencia innata que no se divide en secciones, el proceso del pensamiento que existe dentro de ti. Sólo míralo, obsérvalo. La razón por la cual a nuestra mente se le conoce como conciencia espontánea es porque no tenemos idea de su historia. No tiene forma ni color, ni señas particulares o características. Usualmente parpadea, se enciende y se apaga, se apaga y se enciende, todo el tiempo. A veces está en hibernación, otras veces está por todos lados. Observa tu mente. Chogyam Trungpa
Esta es la conciencia que no nace y no muere. Siempre ha estado aquí. Es eterna, el tiempo no transcurre en ella. Y tu que estabas tan asustado de la muerte, te aterrorizabas de convertirte en un anciano, estabas asustado de mil y un cosas! Y nada ha pasado en realidad: todo ha sido un sueño. Osho
Cuando observas directamente la presencia de la mente, no se perciben colores, aspectos o formas. En primer lugar, como la mente no tiene origen, nunca ha existido. Ahora mismo no se sitúa en ningún lado, ni dentro o afuera de tu cuerpo. Al final, la mente no es sólo un objeto que se dirige a algún lugar o deja de existir. Al examinar y estudiar la mente, debes llegar al entendimiento precíso y cierto de la naturaleza de ésta conciencia, que no tiene origen, ubicación ni fin. Jamgon Kongtrul
La mente no viene de algún lugar, como un invitado que entró a una habitación, mucho menos va hacia alguna parte. No tiene forma o color y no permanece en algún sitio definitivo. De hecho, es completamente intangible y depende sólo de 2 cosas - el objeto que se percibe y los sentidos a través de los cuales es percibido. Observando constantemente nuestra mente de esta manera, debemos comprender que ésta no existe de la manera en que la concebíamos previamente. Rabten & Dhargyey
Puedes averiguar si la mente existe o no sólo con voltear hacia tu interior y reflexionar cuidadosamente. Verás que la mente no tiene un comienzo, o un fin, o un lugar en algún sitio; que no tiene color o forma y no se encuentra dentro o fuera del cuerpo. Y cuando observes que no existe de la misma forma que cualquier otra cosa, intenta mantener esa experiencia sin intentar etiquetarla o definirla. Dilgo Khyentse